Convencete algo

Close Talker, diría Seinfeld.

Parece que entre sus técnicas para persuadir gente, el Presidente yanki Lyndon B. Johnson, acostumbraba aplicar un procedimiento al que denominaba el “tratamiento”. Consistía en pararse muy cerca de la otra persona y hablarle alternativamente en distintos tonos de voz, que incluían la súplica, el llanto, la reconvención y el reproche hasta provocar la incomodidad de su adversario. Sólo a partir de esa incomodidad comenzaba las negociaciones.

Por supuesto que este post no tiene ningún sentido, más allá de poner las fotos que encontré en Internet; pero después de todo ¿qué post en este lugar ha tenido algún sentido? Aún así no dejo de preguntarme cuántas veces lo habrán trompeado al bueno de Johnson, porque después de todo uno no nace siendo Presidente de los Estados Unidos, ¿no? Por ahí el rey de España podría hacer esto desde chiquito sin problemas, pero bueno…ustedes me entienden.